Para cada uno, el éxito es algo completamente diferente. Una madre o un padre, en mi
opinión, puede tener éxito en su vida en la gran tarea de educar en valores a su familia. Y,
aunque parezca que no, tiene su repercusión ya que solemos educar como hemos sido
educados.
La revisión de conceptos es algo muy necesario en la sociedad de la inmediatez en la que nos
hayamos imbuidos. Normalmente los conceptos están llenos de matices que apenas
apreciamos si no nos detenemos a pensar. ¿Qué es la fama, el éxito, el liderazgo, etc.? Tal vez
sean conceptos tan manidos, tan manoseados que, en el fondo, no sepamos con claridad qué
significan.
En mi opinión, es a partir de soledad elegida, entendida como un momento de reflexión y
mirar hacia dentro, como llegamos al éxito y al liderazgo.
Éxito entendido como autorrealización.
Liderazgo comprendido como ser líder de uno mismo para poder liderar.
En el fondo, todos somos líderes imperfectos ya que, para poder ser líder necesitamos
liderarnos a nosotros mismos. Y, liderarse es conocerse. Pero, ¿acabamos de conocernos en
algún momento?
Rebeca Arias AKA Sarah Ross
El Líder Imperfecto 